lunes, 29 de noviembre de 2010

Gin Tonic contra la malaria

Si alguien que vive, pongamos por caso, en Madrid  un día empieza a sentirse mal, a tener escalofríos, dolor de cabeza y de todos los huesos del cuerpo, diarrea,  fiebre y vómitos, pensaría que tiene gripe, o que le ha sentado mal el atracón de ostras del día anterior. Si esa persona vive en Guinea Bissau o en cualquier otro clima tropical y no ha comido ostras, con esos síntomas lo primero que pensaría es que ha cogido la malaria.


El viernes comencé a sentirme así y tras un fin de semana horrible el domingo me hice el test de la malaria para salir de dudas. La prueba es simple: un pinchazo con un artefacto como los de medir el azúcar, y veinte minutos después sabes si tienes el bicho. Negativo. ¡Que alivio!



La malaria  da miedo. Mata a más de un millón de personas al año, sobre todo en África y sobre todo a niños. Ayer mismo me comentaba Malán que este fin de semana ha muerto de malaria en su tabanka un sobrino suyo de cuatro años. Aún no existe vacuna ni antídoto eficaz. Únicamente funciona la profilaxis.
Recuerdo que antes de venir a Bissau acompañé a Pablo a su médico de cabecera para una revisión y cuando le preguntamos qué hacer en caso de coger la malaria nos respondió: "aquí no vengáis que yo me cago por la pata alante".

La malaria es una enfermedad muy antigua. El nombre proviene del italiano medieval "mala aria" (mal aire) aunque también se le llama paludismo del latín "palus" (pantano).  Hace ya mucho tiempo que los chinos la describían como la acción conjunta de tres demonios: uno con un martillo (símbolo de la cefalea), otro con un cubo de agua helada (símbolo de los escalofríos) y otro con un horno ardiente (símbolo de la fiebre). En los humanos se transmite por la picadura de la hembra (ay las mujeres...) del mosquito Anopheles.

Los que vienen de visita a Bissau no tienen nada que temer ya que si tomas los fármacos adecuados, te untas hasta las cejas de Relec y te colocas una de las eficaces pulseras del Zotal, la hembra del Anopheles pasa de ti. Sin embargo, los que vivimos aquí lo tenemos más crudo ya que no podemos tomar las pastillas tanto tiempo si queremos volver con el hígado entero. Sólo nos queda el repelente, la pulsera, el pantalón largo y ponernos hasta las trancas de Gin Tonic. Si, si, de Gin Tonic.

Uno de los grandes problemas a los que se enfrentaban los británicos en sus colonias eran las fiebres, en especial la malaria. Para combatirla utilizaban quinina diluida en agua carbonatada, que es la base de la tónica, también llamada agua de quinina.
Como la cantidad de quinina necesaria era grande, la bebida resultaba muy amarga así que se comenzó a mezclar con ginebra para rebajarla y se popularizó rápidamente primero entre el ejército británico y luego en todo el mundo.

Este cóctel tan fresco, elegante y sencillo será mi receta terapéutica de hoy. Precisamente su sencillez hace que su elaboración sea un proceso algo más complicado de lo que parece. La clave de un buen Gin Tonic está en la calidad de sus ingredientes y aunque últimamente se ha modernizado y en muchos sitios cool lo preparan con manzana o pepino yo voy a dar la mía que creo que es la clásica.

INGREDIENTES

  • Ginebra Bombay Sapphire o Beefeater (mejor si la botella la guardamos en el congelador).
  • Tónica Schwepps de botellín pequeño muy fría.
  • Limas (o limones).
  • Hielo (muy frío, que cruja al echar la ginebra).
PREPARACIÓN
  • En una copa tipo balón o cualquier vaso grande de cristal fino ponemos hielo hasta arriba. Es importantísimo que el hielo sea consistente y no escatimar en la cantidad. Todos sabemos que la diferencia entre un buen y un mal combinado está en el hielo. Lo del racaneo con el hielo es muy habitual aquí en Bissau y por eso es difícil tomarse un buen Gin Tonic.
  • Con una cuchara removemos el hielo para enfriar bien la copa y tiramos el exceso de agua.
  • Añadimos la ginebra. La proporción depende de cada uno. A mi me gusta suave, más o menos una parte de ginebra por cuatro partes de tónica. Es decir, dos deditos de ginebra y el botellín entero de tónica.
  • Cortamos dos rodajas finas de lima fresca (no ese limón seco que todos tenemos en el frigorífico...) y se las añadimos a la copa.
  • Con lo que queda de la lima, exprimimos unas gotas dentro  y frotamos el canto de la copa. No debemos pasarnos con las gotas de lima ya que el gin tonic si está muy ácido no está bueno y sienta fatal.
  • Por último añadimos la tónica y dejamos reposar unos minutos sin remover para que la tónica no pierda fuerza.

Viajeros por el trópico: ¡ disfrutad con calma esta increíble medicina !



BMB







miércoles, 24 de noviembre de 2010

Los postres de Nadir I: pudín de leche condensada

Hace algunos post contaba que no se me dan muy bien los postres. Desde entonces he recibido algunos correos de amigas expertas en postres enviándome recetas. Ya no tengo excusa... Empezaré por los más sencillos y dejaré para el final los difíciles como suflés y masas. Supongo  que hacer un buen postre es, como todo, cuestión de práctica. 
¡ Cuantas veces tuve que tirar las lentejas en mis comienzos culinarios hasta que conseguí hacerlas decentes !

Ayer hice el pudín de leche condensada cuya receta me envió Nadir, una amiga de Bissau. El pudín o budín viene de la palabra inglesa pudding y es una comida o postre, puede ser salado o dulce, cuya base de preparación es el huevo y la leche y luego se le añade pescado, verduras, frutas, pan, magdalenas o lo que a uno se le ocurra.
Los ingleses lo toman mucho, sobre todo en navidad. Recuerdo un año que estuve trabajando en Londres y cuando volví a casa para nochebuena compré un Christmas Pudding en el aeropuerto de Heathrow. Por fuera era precioso pero me hizo sospechar su peso. Ya en casa se confirmaron mis sospechas: resultó ser hormigón armado. Armado de miel, pasas y melaza...casi ná.


El de leche condensada es sencillísimo de hacer. Tiene un sabor muy parecido al flan de huevo aunque con una textura más fina.
Lo hice ayer por la tarde y como tenía invitados, lo serví de postre. Estaba muy bueno pero no lo suficientemente frío. Esta mañana me he tomado un trozo (picoteo ligero a media mañana...) y estaba muchísimo mejor. Al pudín le pasa como a casi todos los platos: mejor reposado.

INGREDIENTES
  • 1 lata de leche condensada pequeña.
  • 4 huevos
  • 3 medidas de la lata de leche condensada con leche normal.
  • 2 cucharas soperas de Maizena
  • 1 taza de azúcar para preparar el caramelo

PREPARACIÓN
  • En un recipiente poner el contenido de la lata de leche condensada. Llenar la lata con leche normal y con una cuchara limpiar bien las paredes para aprovechar la leche condensada. Añadir al recipiente con leche condensada. Volver a repetir esta operación una segunda vez.
  • Volver a llenar la lata con leche normal una tercera vez y disolver en la leche la Maizena para evitar los grupos. Añadir a la mezcla de leches.
  • Batir 4 huevos y añadirlos a la mezcla. Después, batir todos los ingredientes en la batidora hasta conseguir una mezcla homogenea.


  • Derretir el azúcar en un cazo o sartén antiadherente hasta hacer caramelo. Verter el caramelo en un molde de pudín con tapa. Este paso ha de ser rápido para que no cristalice el caramelo.Extender todo el caramelo por el molde moviéndolo o ayudándose de una cuchara de madera y dejar enfriar un poco.
  • Verter la mezcla en el molde y tapar (si no tiene tapa se puede hacer con papel de aluminio)
  • Poner agua en una cacerola grande y colocar el molde dentro para cocerlo al baño maría. Tener cuidado de que el nivel de agua no sobrepase la mitad del molde para que no entre agua dentro. A lo largo de la cocción necesitaremos añadir más agua.

  • Cocer unos 45 minutos (yo necesité tenerlo 50 min). Sabremos si está hecho si al pinchar con un palito de brocheta ( o la tradicional aguja de hacer punto) el palito sale limpio.
                                                   
  • Dejar enfriar un poco y meter en el frigorífico. Desmoldar cuando este muy frío y servir.
Bon appétit !



BMB

viernes, 19 de noviembre de 2010

Tiramisú

El Tiramisú es cuestión de cariño. El secreto está en mezclar con mucho mimo y delicadeza los ingredientes, acariciando la nata, arrullando el queso, meciendo las claras para que la mezcla quede suave y cremosa y no se corte.

Hay muchas discrepancias en cuanto a su procedencia. La historia más pintoresca dice que surgió en los burdeles del Veneto, en Italia en los años 50. Por aquel entonces los burdeles tenían cocinero y la maîtresse se lo ofrecía a los clientes diciendo las palabras: "Toma cariño, te doy una cosa que te tira su". La expresión "te tira su" equivale a tentempie en español. Otras fuentes son más partidarias del origen toscano del tiramisú. Parece que a finales del año 1600 el gran duque de la Toscana, gran aficionado a los dulces, visitó Siena y quisieron preparar algo grande y nuevo en su honor. Entonces se llamó "zuppa del duca" y le gustó tanto que lo llevó a Florencia desde donde se extendió a la Lombardía y el Veneto.

Parece ser que originalmente no llevaba queso mascarpone. La receta ha ido evolucionando con el paso del tiempo. Se puede hacer con cualquier tipo de queso fresco, sin queso, con nata o sin nata, con coñac, ron o Amaretto. Hoy en día hay tantas formas de hacer el tiramisú como cocineros. El que hace mi madre está exquisito. Ayer, que teníamos invitados, nos preparó uno para la cena. Itler y yo hicimos de pinches.


INGREDIENTES
  • 3 huevos.
  • Azucar. De 8 a 10 cucharadas según gustos.
  • 500 grs de queso mascarpone.
  • 1/2 litro de nata para montar.
  • Café .
  • Bizcochos tipo soletilla. También sirve cualquier bizcocho pardo.
  • Coñac.
  • Cacao amargo en polvo.
  • Fideos de chocolate.
PREPARACIÓN
  • Separar las yemas de las claras. Batir las yemas con el azucar hasta obtener una pomada. Añadir el mascarpone y batir en la batidora hasta conseguir una mezcla cremosa.
  • Montar la nata y anadírsela a la mezcla anterior a mano con las varillas.
  • Montar las claras apunto de nieve y (aquí viene lo importante) añadir a la mezcla con las varillas, con movimientos envolventes y con cuidado de que no bajen las claras.
  • Hacer un café fuerte, añadir un vaso de licor, nosotros le pusimos coñac, y dejar enfriar. Esto último es importante ya que sino, se puede cortar la crema.
  • En una fuente o en cuencos individuales, poner una primera capa de crema. A continuación, mojar los bizcochos en el café y poner una capa de bizcochos. Luego, poner otra capa crema, otra de bizcochos y por último una de crema.
  • Dejar enfriar en el frigorífico al menos 8 horas. Está muchísimo mejor si se hace el día anterior.
  • Antes de servir espolvorear con cacao amargo y poner encima unos fideos de chocolate.

Mi madre con su tiramisú




BMB


jueves, 18 de noviembre de 2010

Tabaski

Hoy se ha celebrado en Bissau, y en todo el mundo musulmán el Tabaski, que es el nombre que se le da en el África Occidental al Aid el Kebir, la fiesta más importante para los musulmanes. Es una ceremonia religiosa que se celebra al final de la peregrinación a La Meca,  unos 70 días después del Ramadán y que conmemora el gesto de Abraham y su obediencia a Dios. Según el Islam, a petición de Dios, Abraham iba a sacrificar a su hijo pero viendo su sumisión le permitió que sacrificara un cordero en lugar de su hijo.Por eso también se llama la fiesta del cordero o del sacrificio.

Es una fiesta alegre, todo el mundo sale a la calle y el dinero circula más que nunca por el mercado de Bandim. Para el cabeza de familia económicamente es muy dura ya que está obligado a comprar el cordero, trajes a medida para sus mujeres y ropa para sus hijos y la mayoría tienen varias mujeres y media docena de hijos... También se invita a los vecinos y amigos más íntimos. Se trata de dar al máximo para recibir las máximas bendiciones. Esa es la filosofía del Tabaski.
El día empieza rezando en la mezquita, luego, los hombres matan los corderos y las mujeres los cocinan de varias maneras. Después, se trata de comer cordero hasta caer muerto.










El Presidente de la República, Malan Bacai, por primera vez ha invitado al Cuerpo Diplomático y algunas personalidades para la celebración del Tabaski.
Al inicio de la fiesta, el Presidente,  pronunciaba un pequeño discurso en el  que daba la bienvenida y explicaba que a pesar de ser musulmán, no quería que la fiesta tuviese un significado religioso sino que fuese un encuentro de amigos. Además adelantaba que el día de navidad también celebrará otra fiesta.

La mayoría de los guineanos, tanto hombres como mujeres vestían el traje tradicional. El resto, traje formal.
La cena  ha sido un buffet al aire libre y la ha servido el Hotel Malaika. Por supuesto había cordero, que por cierto estaba picantito y buenísimo. Las mesas estaban colocadas en el jardín y en el centro estaba la mesa presidencial.
Al fondo, un grupo de música guineana amenizaba la velada. Luego, el Presidente ha pasado de mesa en mesa saludando y dando la mano a todos y después se ha marchado.
Como casi todas las recepciones en Bissau, la de hoy ha durado dos horas justas y luego todos para casa.

BMB





domingo, 14 de noviembre de 2010

De vuelta en Bissau con mi madre.

¡ Bendito sea Dios !. Eso es lo primero que dijo mi madre al pisar Bissau. Cuando llegas por primera vez aquí el impacto es terrible. La oscuridad por las calles es total. El olor a África, mezcla de humedad, humanidad y pobreza, lo inunda todo. A lo lejos se oye el ruido de los generadores y miles de insectos vuelan alrededor de las escasas bombillas encendidas.  Entre las sombras de la noche se adivinan la miseria y la inmundicia. Al día siguiente la luz confirma la ruina.  De camino al mercado mi madre va muda y con los ojos como platos. Lo que más le llama la atención es la cantidad de edificios abandonados a medio construir. Me pregunta qué hace tanta gente por la calle sin hacer nada. "Están esperando" le contesto yo. En África la gente se pasa el día esperando. Andan de aquí para allá y hablan de la situación del país. Pero sobre todo, esperan.

En el mercado mi madre está alucinada. Decenas de mujeres nos rodean ofreciendo sus productos. Gritan y se pelean entre ellas por conseguir vender lo suyo. Yo regateo tratando de obtener un precio razonable que casi nunca consigo. Los precios son abusivos y los productos malísimos. Es lo que hay.

El viernes hemos quedado en el puerto a la doce con Samba, el marinero que nos llevará a las islas. Como era de esperar, no está. En Bissau la hora de quedar es orientativa...Mientras, un grupo de hombres que hablan una mezcla rara de francés y criollo cogen nuestras maletas y las meten en un barco. Tras una conversación de besugos que dura varios minutos, deducimos que ese no es nuestro barco y volvemos a sacar las maletas. A la una, por fin aparece Samba y salimos rumbo a Rubane. Vamos Pablo, mi madre, Luis y yo.

Después de dos horas de viaje, estamos en el paraíso. El hotel, Ponta Anchaca, me encanta. El paisaje precioso, la playa magnífica, el trato exquisito y la comida deliciosa.


Baño en la piscina de Ponta Anchaca
Paseo por la playa
De pesca

El sábado salimos de pesca. Mi madre pescó el primero, una garopa, será por aquello de la suerte del principiante..Luego Luis pescó una dorada enorme y después de las fotos pertinentes navegamos frente a las inmensas playas de Bubaque donde vimos este espectacular atardecer...








BMB


martes, 9 de noviembre de 2010

Muerte en Venecia

Mi Mac ha muerto en Venecia. Estoy hundida. Un mazazo. Yo, que siempre despotricaba de las ratas de ordenador y resulta que...estoy enganchada a internet. Escribo este post desde un ordenador prestado (maravillas de la informática) ya que acabo de dejar el mío en el servicio técnico.

Para más inri, las vacaciones han pasado muy rápido y mañana volvemos a Bissau.  
¡ Porca miseria !
Dada la dramática situación, seré breve. Resumo en cuatro líneas los últimos días de vacaciones.
No se puede estar sin conocer Italia. El que no la conozca, que se vaya montando un viajecito sin más dilación.
Italia es arte, pasta y vino. Aunque no la única, una de mis principales motivaciones a la hora de viajar es la gastronomía y en Italia se han cumplido todas mis expectativas. He probado la pasta de todas las formas posibles. Aunque la elección es difícil, me quedo con los penne arrabiata. ¡ Como me gusta la pasta picante con un buen tinto !
Venecia es única, Florencia es encantadora, pero yo, me quedo con Roma.
Tras un par de días en Sevilla a régimen estricto de jamón y manzanilla, hemos llegado esta tarde a Madrid para recoger a mi madre que se viene con nosotros a Bissau.

Me encanta Madrid. Se podría decir que soy madrileña ya que he vivido en Madrid 20 años, más que en ningún otro sitio. Me gusta entrar a Madrid por el Paseo de la Castellana. Me gustar pasear por sus calles y volver a pasar frío. Me gusta comprar libros en Madrid y como tiran la cerveza. Me gusta hacer cola para entrar al cine y que se me empañen las gafas al entrar en un bar lleno hasta los topes. Me gusta volver a ver a mis amigos de Madrid. Me gusta que Madrid no tenga playa. Me gusta hasta la presidenta de la Comunidad de Madrid. 

Dentro de algunos años, no sé cuantos, volveremos a Madrid. Menos mal que mientras tanto Madrid seguirá aquí, esperándome.


BMB

martes, 2 de noviembre de 2010

Paseo por Italia IV: Venezia


Venecia es una ciudad única en el mundo. Está situada sobre una laguna pantanosa en el Mar Adriático. El Gran Canal divide la ciudad en dos partes y cientos de canales más pequeños desembocan en el Gran Canal formando una intrincada red con más de 400 puentes peatonales.


Góndolas en el Gran Canal.
De día es viva y alegre. El corazón de la ciudad es la Piazza de San Marco, llena de turistas que van a tomar un café en el popular Florian, a visitar la catedral o a hacerse fotos con las palomas.

Turistas en la Piazza de San Marco
Es una delicia pasear por sus callejuelas empedradas y descubrir en cada rincón una librería de viejo, un anticuario, una bonita iglesia o una tranquila placita.

Paseo en góndola

Las góndolas eran la forma de desplazarse de los nobles y la gente pudiente por los canales. Hoy en día sólo las utilizan los románticos turistas como nosotros. No hay que perderse el paseo en góndola para poder admirar los suntuosos palacios llenos de historia.

Chinos en góndola
Casi todas las góndolas que hemos encontrado en nuestro paseo iban llenas de chinos. Recuerdo que hace años cuando viajabas por Europa veías sobre todo americanos. Ahora la clase medio alta china gasta sus yuanes en Gucci, Versace o Armani.

Góndola por los pequeños canales.

Palazzo Ducale

De noche, ya sin turistas, Venecia es tranquila y misteriosa. Ayer, cenamos en una pequeña osteria junto al Teatro de la Fenice y desde allí dimos un paseo hasta San Marco donde tomamos un macchiato escuchando el sonido de un clarinete al fondo.

Teatro de La Fenice


BMB